viernes, 21 de agosto de 2015

Turisteando en: Seattle

Hace un par de meses, unos amigos y yo nos fuimos de vacaciones a Seattle a visitar a unos amigos que viven por allá. El paisaje es muuuuuy diferente. Viniendo de un lugar semidesértico, donde lo mas que alcanza son unos matorrales chaparros en los cerros y palmeras impuestas (que para que se vea bonito), tanto verdor me hizo sentir que la vegetación me atacaba.

Diciendo eso, un cambio de ambiente se sintió muy bien.

Como siempre, nos la pasamos cazando ofertas de vuelos desde como [6 meses antes], para encontrar buenos precios y que todos pudiéramos pedir permiso.

Guia turística: Seattle

Alojamiento

Dos semanas antes de viajar no teníamos donde quedarnos. El plan era estar unos días en Seattle, luego movernos a Redmond, donde viven nuestros amigos. La razón es ahorrar transporte mientras visitamos el centro. El problema era que fue fin de semana largo para Estados Unidos, así que había la posibilidad de no encontrar hoteles baratos.
Un amigo sugirió un flamante Hilton o Sheraton. Pero el presupuesto no alcanzaba más que para un hostal o algún hotelillo. Cuando pensamos en hostal fue “hay que compartir baño, no no no”. Así que nos fuimos por el “hotelillo”...

The Moore hotel: “La pocilga” como cariñosamente le apodamos, es un hotel con unos 100 años, mas o menos, de antiguedad. Nos tocó en el último de los 7 pisos, en un cuarto tipo “europeo”, osea que había que compartir baño, para nuestra desgracia/sorpresa. Hay cuartos con baño propio pero salen mas caros. No sabíamos hasta que vimos el cuarto: pequeño, las camas no eran el tamaño que nos habían especificado, tenía un lavamanos con espejo, televisión, las ventanas no tenían mosquitero, me recordó a esa película “1408” con John Cusack, si, la del cuarto de hotel maldito. Al final fue divertido. Había que levantarse muy temprano o bañarse a media noche para encontrar el baño desocupado, lo mismo para la pipis/pupus. Pasillos tétricos y cuartos con olor a viejo. El plus de este hotel es que está a solo 2 cuadras de Pike Public Market. Desde ahí se puede ir caminando a muchos lugares. Lamentablemente no tomamos fotos, el shock fue muy grande. [The Moore Hotel]

Redmond inn: Nos movimos a Redmond a un hotel a dos cuadras de la casa de nuestros amigos. Debo decir que fue una experiencia más placentera. El cuarto era más espacioso, con baño propio!!!! Desayuno gratis incluido, piscina techada y jacuzzi... :D. El staff muy amable. Por supuesto que no usamos ninguna de las instalaciones, estuvimos muy ocupados turisteando. [Redmond Inn]

Entretenimiento

Hay tantas cosas que hacer y ver en Seattle, que una semana pudiera no alcanzarte. Tampoco el dinero.

Pike Public Market: Mercado público más antiguo de Estados Unidos, me parece  que tiene 100 años o más. Aquí puedes encontrar de todo: artesanías, frutas y verduras frescas, conservas, flores, restaurantes, tiendas de libros, souvenirs de todo tipo, etc. Y es que se extiende hasta 6 pisos hacia abajo. Aquí también te encuentras a los pescadores que se arrojan el pescado mientras cantan. Y te ofrece una vista al rio. Is a must. [Pike Public Market]

Santos Salmones voladores, Batman

Ride the Ducks: Te pasean en un vehículo anfibio! Vas por la carretera y de pronto, pum! Al agua patos, con un recorrido de aproximadamente media hora por el río, con Seattle en el fondo. Los conductores son divertidisimos y crean el ambiente para que todos terminemos cantando “Call me maybe”. Tiene dos estaciones y el recorrido es como de 1 hora mas o menos. [Ride the ducks].

On a Duck! Vista de la bahia
Tour Subterráneo: Te sorprenderias de las cosas que hay debajo de Seattle. Este tour te lleva por un par de cuadras en la “otra Seattle”, la escondida, la subterránea y sucia Seattle de 1890s. Vale la pena escuchar historias de como inicio la ciudad y sus problemas de plomería. [Underground Tour]

EMP: El museo para los geeks, EMP es una mezcla de música, comics, arte pop, ciencia ficción y cine. Si eres muy fan de este género, te vas a divertir. Cuando fuimos habia exhibiciones de Nirvana, videojuegos indie, peliculas de terror y Star Wars. [EMP Museum]

Exposicion sobre video juegos
Esposicion sobre los vestuarios de Star Wars

Space Needle: Si vas a Seattle y no fuiste a Space Needle es como si no hubieras ido. Creada para la feria mundial de 1962, imaginar el paisaje de la ciudad sin ella es como pensar en Nueva York sin la Estatua de la Libertad al fondo. Si la visitas conviene comprar el combo de boletos de Space Needle mas el Chihuly Glass Museum o el Museo de Ciencias del Pacifico, te ahorras unos pesitos. [Space Needle]

EMP + Space Needle

Chihuly Glass Museum: Te encontrarás en este museo con hermosas esculturas hechas con vidrio. Coloridas, retorcidas, grandes, pequeñas, enormes! Con un poco de suerte, verás una demostración de como hacer una pieza e información relacionada a las técnicas para trabajar el vidrio. De noche se ilumina el jardín y con la “Aguja Espacial” de fondo… hermoso! Pero si no te llama la atención, mejor ahorrate ese dinerito. [Chihuly Garden and Glass]

Glass, glass everywhere

Kerry Park: Entre nuestros planes era ir a Kerry Park… caminando! Que bueno que no lo hicimos. Este parque ofrece una hermosa vista de la ciudad. Nosotros visitamos el parque de noche.

Vista nocturna de Seattle desde Kerry Park

Si te sobra tiempo…

Mount Rainier: Si te sobra , digamos un día (porque son como 3 horas de camino), aventurate a Mount Rainier! Pero revisa primero el estado del tiempo o te pasará como a nosotros, que vamos bien “veraniegos” en mayo y estaba a 8 grados Centígrados o menos, con nieve, nublado, lluvioso; no íbamos preparados, pero pues, de eso se trata la aventura! Corrimos a comprar paraguas, yo me compre un sweater, porque en serio, no llevaba otra cosa para cubrirme. No logramos llegar muy lejos, la nieve lo hacía peligroso. De regreso, conocimos a una mujer de 78 años, Anna Marie, alemana residente de Washington, que nos contó historias interesantes de su vida. Luego llegamos al refugio, a medio secar los tenis en la chimenea y con una taza de chocolate caliente, yum! [Mount Rainier]



Leavenworth: Un pueblito estilo alemán en la orilla de un río, enclavado en la montaña. Recuerdan a Anna Marie? Una amiga alemana de ella que lo visitó dijo “is this a joke?” Refiriendose a lo falso que se ven las fachadas comparadas con un pueblo tradicional bávaro. Pero no importa, no le quita lo bonito! Otras 3 horas de camino para llegar ahí. Hambre? Salchichas alemanas a la orden. [Leavenworth]


 

Chomps, Chomps


No fuimos quisquillosos y nos gusta probar cosas diferentes.

Hot Dogs: De tanto caminar, nos dio hambre y como hacia falta algo de tiempo para llegar al restaurante, paramos a comer unos hot dogs. Cada cierto lugar tiene su estilo de prepararlos, ejemplo Nueva York y Chicago (no de mis favoritos), en Seattle, se preparan con queso crema. Y si a eso le sumamos un samurai, salen unos hot dogs fusion gourmet algo extraños. Pero ricos. Yo me quedo con los que hace mi mama. [Dog Japon]

Skillet: Nuestros amigos nos invitaron a cenar a este restaurante ubicado en Capitol Hill. Muy rica la comida, abundante, te lo sirven directo del sartén. Yo pedí la hamburguesa vegetariana, deliciosaaaaa! Y los precios me parecieron accesibles para el lugar y la ciudad. Después te puedes ir de party, ya que el distrito fiestero esta a unas calles de ahi. [Skillet]

Starbucks: Seattle está obsesionado con el café. No sorprende que haya un Starbucks en cada esquina, además de que existen otras cadenas de cafeterías, cada una con su estilo y su sello personal. Mmmm… café, café, café! [Starbucks Store]

Piroshky Piroshky: Panes tradicionales rusos con un twist. Rellenos de cosas dulces o saladas, están super ricos!! Es un establecimiento pequeño en Pike Public Market, casi al lado del primer Starbucks. Y por ser tan pequeño, hay fila para comprar. Pero un poco de espera tiene su recompensa. [Piroshky Piroshky]

Lowell's (at Pike Market Place): la primera vez que probé una crema de almeja (clam chowder) fue en San Francisco. Aun me falta colmillo para distinguir una buena de una mala, para mi todas son buenas, jeje, pero por eso es mi deber probarlas todas, a donde quiera que vaya! Esta se encuentra al interior de Pike Market, con una vista al río y la rueda de la fortuna. Si no te gusta la almeja, hay otras cosas en el menu que puedes probar. [Lowell's]

Lola: fuimos aqui para desayunar, pero tienen menú para todas horas. Me recuerda a un restaurante al que irías a desayunar con tu familia un domingo. Muy rica la comida, el precio creo que esta en los estándares por el lugar, pero sí me pareció medianamente elevado, hubiera podido desayunar en otro lugar por menos. Algo que comentar es que me pareció ruidoso. Y hay que hacer reservación porque es muy solicitado. [Lola]

Portage Bay: Desayunos preparados con ingredientes orgánicos. Tiene una barra de fruta fresca para acompañar tu desayuno, sin embargo, tiene cargo extra. Este lugar también se llena rapido, asi que haz reservación o espera un poco en la linea, asi te da más hambre. [Portage Bay]

Kanishka Cuisine of India: Tikka Masala!!! Y no diré más. [Kanishka]
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Me encanta el tikka masala. Y me encanta sopear el naan en la salsa! Esta muy rico. Fuimos a este lugar a cenar con nuestros amigos. Ellos lo frecuentan tanto que el mesero ya los conoce, así que nos trataron como VIP. La comida está muy rica. Y además, puedes acompañar tu comida con tu película Bollywoodesca favorita.

Moore Coffee Shop: Esta cafetería esta al lado del hotel Moore. Salíamos tan rápido todos los días que no nos daba tiempo de ir por un café. Pero al final, nos dimos ese tiempo para hacer la fila y comprar. Está pequeño y es muy concurrido. Y como no, si está muy rico el café! Y nos sorprendió con arte en latte. [Moore Coffee Shop]



Los viajes pueden dejarte experiencias y aprendizajes que no conseguirás de ninguna otra forma. Y trato de aprender cosas cada que puedo.

Que aprendí en este viaje en particular? Que puedo compartir el baño con un piso completo de un hotel.

Y aunque parece que hicimos muchas cosas y anduvimos a mil por hora, siento que faltó mucho tiempo para hacer más cosas. Así es siempre.

Pero es el pretexto perfecto para regresar.